Una planta está llamando a su atención

Por: María José Trucco

Fecha de publicación: Enero 20, 2025

Fotos: Guías, Registro de función, Vivero Los abuelos y Vivero Municipal Eduardo Holmberg, Cazón, 2024. © Catalina Di Cesare. 


«¿Dónde está? Le invito a recorrer este espacio con la mirada. ¿Una planta está llamando a su atención? Una planta está llamando a su atención. ¿Puede acercarse?» 

Esta invitación hace parte de GUÍAS, pieza teatral sonora que convoca a registrar ciclos de nacimiento y muerte a través del vínculo con plantas. Hay una propuesta específica para la audiencia: escuchar una pista de audio a la vez que se realizan tareas de riego, cosecha, transplante, poda, siembra, raleos, abonos, caminatas, descanso en co-presencia. La pieza está diseñada para ser ejecutada con auriculares -de modo individual o en sesiones compartidas- y en contextos favorables donde estar con plantas, como la propia casa, una plaza, un parque, la huerta, jardines, veredas, campo traviesa. Se construye a sí misma como un poema práctico, que propone la escucha como acción y ensaya posibles reconexiones con los cambios, las metamorfosis, las mutaciones de la tierra que nos conforma. 

Un dispositivo 

Fanzine Guías, Ediciones Margaritas, 2022. © María José Trucco. 

En términos teatrales, la obra transfiere gran parte de la acción a la audiencia y propone explorar el espacio-tiempo donde acontece la experiencia a través de pruebas físicas de distinto tipo. Una serie de estímulos y ejercicios para enfocar la atención en la membrana porosa entre adentro y afuera, entre el sí-mismx y la tierra, con las plantas como médiums, como agentes de contacto, en tanto la instrucción “escuchar la pista a la vez que se realizan acciones de vínculo con plantas” es abierta y permeable y cada quien puede hacer comunicación del modo que le sea dado.

El texto dramático de la pieza no se ajusta al clásico modelo de conflicto sino que se elabora a partir de la contemplación del proceso vital interconectado, de flujos múltiples. En este sentido, y volveremos más adelante a esto, «una relación entre los elementos de la novela puede ser la del conflicto, pero la reducción de la narrativa al conflicto es absurda. (He leído un manual de cómo escribir que decía: “Una historia debe ser vista como una batalla”, y continuaba sobre estrategias, ataques, victoria, etc.). Conflicto, competencia, estrés, lucha, etc., dentro de la narración concebida como bolsa de transporte / panza / caja / casa / atado de medicinas, pueden verse como elementos necesarios de un todo que en sí mismo no puede caracterizarse ni como conflicto ni como armonía, ya que su propósito no es la resolución ni la estasis (inmovilidad), sino un proceso continuo.» (Le Guin, 2021: 12). 

Teniendo la dramaturgia de la obra una raíz contemplativa, y en este sentido, identificándonos con la categoría que crea la directora Manuela Infante, al señalar que una dramaturgia recolectora consiste en componer espacio-temporalmente cuerpos, pensamientos, palabras, imágenes, sonidos, voces, acciones, etc. (Anselmi y Trucco, 2024), la obra propone una comunicación interespecífica in situ, donde el principio fundante de la convivio teatral entre actor y espectador se desplaza para ser extendido a la relación convivial de la audiencia con el mundo más que humano. No hay lucha que espectar, sino interconexiones con las que convivir. 

Lo doméstico, las plantas, la trama 

Nos asentamos en la radicalidad de construir una pieza solo con dejar emerger, dejar emerger imágenes propias de una vida humana en la tierra, sin querer agregar mucho más, salvo, reforzar el gesto de la superposición, de la convivencia, del a la vez. La pieza se articula con las prácticas domésticas del cuidado, cultivo, disfrute y gozo de estar con plantas. Y preferimos denominarlas como prácticas domésticas -no menores-, que atañen al “domus”, a lo relativo a la casa en latín, y que nos queda más cerca del griego “oikos”, de donde nos llega ecos, ecología.  

Guías, Dibujos, Teresa Arce, 2021. © Teresa Arce. 

Si exploramos las prácticas domésticas como la serie de acciones que componen la trama, los gestos, las texturas, las huellas que crean una vida y sucesivamente y por adición, una época, encontramos que éstos son los quehaceres propios de un territorio. Y entonces nos incitamos a ensayar colectivamente una labor, a entrar en la práctica, a proponer focos de atención y a derivar en ella algunos pliegues ficcionales. Porque ¿qué puede hacer de una práctica doméstica un hecho significativo? La proposición afirma una confianza y una necesidad. Un tipo de relación con el contacto manual, un contacto que en sí mismo, enseña, como dice la canción infantil que solía sonar en voz de Judith Akoschky “quién te enseñó carpintero, quién te enseñó a serruchar, fue fue fue un serrucho, un serrucho de verdad”.

Lo doméstico, el cultivo, el estar con una, el estar con las cosas, como una meditación silenciosa en medio del ir y venir. Se cuidan plantas a la vez que sentís vacío. A la vez que te enfermás. A la vez que un rincón captura tu atención. A la vez que regás. A la vez que una pieza teatral sonora te propone ensayar el a la vez.  Sumergirte en la tierra a la vez que reescuchás imágenes que podrían haber pasado por tu mente. A la vez que buscás cobijo en una planta. A la vez que le pedís consejo. A la vez que los días pasan, a la vez que hacés y contemplás. A la vez que sos audiencia, a la vez que hacés convivio con un ser vegetal. 

Una práctica para ensayar cercanía, contacto, intimidad con la tierra, que es intimidad con una misma. 

Contactar, conversar, convivir, co-incidir 

La conversación con plantas no tiene instrucciones, se presenta como un invitación para inventar una codificación donde seguir practicando la reunión. Ante el sistemático entrenamiento en la separación y el modelo de conflicto y dominio que nos ha traído hasta acá, nos incitamos a seguir en esta pequeña, cotidiana, doméstica labor de estar juntas, incluso y precisamente ante el dolor y la urgencia. 

Y entonces ¿de qué modo esta pieza opera como siembra de otras imágenes? La pieza quiere ser un medio, un acontecimiento que propicie la sincronización. “Todos los seres vivos somos osciladores. Vibramos. Seamos amebas o humanos, palpitamos, nos movemos rítmicamente, cambiamos rítmicamente; marcamos el tiempo. (...) Estar en sincronía - internamente y con el entorno- simplifica la vida. Perder la sincronía es incómodo o desastroso. Escuchar no es reaccionar, es establecer una conexión. Al escuchar una conversación o una anécdota, no sólo respondemos a ella, sino que nos sumamos, pasamos a formar parte de la acción.” (Le Guin, 2018: 161) 

O como señala Pauline Oliveros, música y creadora de técnicas de escucha profunda, “cuando escuchás, las partículas del sonido deciden ser escuchadas. La escucha afecta lo que suena. La relación es simbiótica. Cuando escuchás, el medio ambiente se vivifica. Este es el efecto que produce escuchar” (Oliveros, 2023). 

Fotos: Guías, Registro de función, Huarte, Tandil, 2024. © María José Trucco.

Nos gusta pensar en las afectaciones que quedan en los entornos donde la pieza suena. Siendo una proposición de escucha de nosotras mismas a través de las plantas que co-inciden en ese lugar, e invocando el poder vibrátil y las fuerzas de todos los actantes, nos disponemos a dejarnos conmover y atravesar por las enseñanzas que el mundo más que humano pueda brindar para celebrar y poder estar bien en las metamorfosis que tengan lugar.


Referencias

  • Anselmi, Diego y Trucco, María José (2024). “Modos de extender guías para la reconexión”, en Actas I Congreso Internacional de Artes. Buenos Aires: UNICEN. 

  • Le Guin, Úrsula K. (2018). “Contar es escuchar”, en Contar es escuchar. Madrid: Círculo de tiza.

  • Le Guin, Úrsula K. (2021). La teoría de la bolsa de la ficción. Buenos Aires: Oficios varios. 

  • Oliveros, Pauline (2019 [2005]). “Meditaciones de Deep Listening”, en Deep Listening. Una práctica para la composición sonora. Buenos Aires: Dobra Robota Editora.

  • Oliveros, Pauline (2023). En Escuchar en sueños, IONE. Buenos Aires: Dobra Robota Editora. 


Notas

Hacemos GUÍAS

  • Voces_ Diego Anselmi, Ximena Romero, Rocío Martínez, Fernando Brinkman, Andrea Bianco, Pepe Bramajo, Vito Bianchi, Edgardo Costa.

  • Música y Diseño de Sonido _ Ignacio Villa

  • Fotos _ Catalina Di Césare

  • Dibujos _ Teresa Arce

  • Colaboración artística _ Ximena Romero

  • Texto y Dirección _ María José Trucco

El proyecto es una colaboración del CPTI, Ediciones Margaritas y Las fuerzas vivas.

Instragram: @guias.piezateatralsonora


María José Trucco: Investigadora en el campo de las artes vivas. Licenciada en Artes Combinadas (FFyL, Universidad de Buenos Aires, 2004), especialización en Epistemologías del Sur, CLACSO. Dedicada a la creación de proyectos de reunión y comunicación entre naturalezas diversas. Desde 2008 codirijo CRA Centro Rural de Arte y vivo en la cuenca del Río Salado, llanura pampeana.


Para citar: Trucco, María José . “Una planta está llamando a su atención” Signatura, vol. 4.2, enero 20, 2025 URL: https://www.humanidadesambientales.com/signatura/012025-v4-trucco-guias-planta-atencion

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